El aeródromo catalán cuenta con una sola pista operativa de las tres que tiene debido a los trabajos de mantenimiento por lo que los despegues arrastran más de una hora de espera.

Largas colas de aviones en la única pista abierta del Aeropuerto de Barcelona. A lo largo de este viernes, varios pasajeros expresaron sus quejas por demoras de más de una hora para abandonar la instalación catalana. Lo peor del caso: la espera se producía dentro del avión debido a la caravana de aeronaves en la pista, que ha alcanzado hasta los 10 aviones, según ha podido comprobar Cerodosbé.

Vuelos como el VY2488,  de Vueling San Sebastián; el DY1741, de Norwegian Oslo; el U21412, de Easyjet Ginebra; y el BA475, de British Airways Londres, arrastran ya una hora y media de retraso debido a la configuración actual de la instalación catalana, que soporta las obras por asfaltado que se prolongan desde el pasado enero.

Sin embargo, este viernes la situación es especialmente crítica debido a que los aterrizajes y despegues deben producirse por la misma pista: la número tres, ya que las otras dos se encuentran en mantenimiento. Un recorte a las operaciones que se producirá durante varios días debido a que los trabajos afectan al tramo de la pista transversal que se cruza con la principal.

Desde el inicio de las obras, la capacidad de la base se ha reducido un tercio, por lo que se pueden realizar sólo 48 operaciones por hora (24 salidas y 24 llegadas) en lugar de las 72 habituales (40 salidas y 38 llegadas). Durante la jornada de hoy, el volumen de aterrizajes y despegues se ha recortado todavía más.

“Cerraremos después de Navidad y abriremos antes del Mobile World Congress 2017, la época en la que hay menos vuelos del año”, señalaban en su momento fuentes de Aena. El coste de la acción será de 25 millones de euros y también implicará mejoras en algunos tramos de las calles de salida R1, R5 y R6, deterioradas con el paso del tiempo.


Vía Cerodosbé